A los que sueñan sus verdades y se las niegan,
a los que tienen mucho miedo, y lloran por cualquier cosa,
y se ocultan la cara de vergüenza.
A los tímidos, a los solos, a los raros,
a los que dudan y dudan y les llaman inmaduros, débiles.
A los que llevan cicatrices de haberse rajado las venas,
a los que consiguieron no rajárselas,
a los que les paraliza la angustia,
les paraliza para ser, amar, soñar.
A los que llaman vagos, idiotas, locos, débiles.
No escuches la voz de los que viven sólo para afirmar, controlar,
o los que saben adónde van, dónde están, quiénes son,
los que llevan la frente alta y no les tiembla la voz.
A los que la ansiedad- la sociedad les hace fumar dos paquetes diarios,
a los que no son sociables, ni aptos, ni lúcidos,
ni extrovertidos, ni empáticos, ni asertivos, ni normales.
A los que nunca superarán un test psicológico.
A los que no soportaron el túnel y se fueron para siempre,
a los que atravesamos cada día el túnel agarrados a las paredes negras,
A todos los que saben o quieren escucharnos,
y no se fían sólo de los manuales, libros, test, estudios y estadísticas.
A los que roban dolor y devuelven sonrisas,
Y sobre todo, a todas esas pupilas dilatadas de tanta química que miran
aturdidas; pero tienen luz más hermosas:
" Que no existe locura, sino gente que sueña despierta"
a los que tienen mucho miedo, y lloran por cualquier cosa,
y se ocultan la cara de vergüenza.
A los tímidos, a los solos, a los raros,
a los que dudan y dudan y les llaman inmaduros, débiles.
A los que llevan cicatrices de haberse rajado las venas,
a los que consiguieron no rajárselas,
a los que les paraliza la angustia,
les paraliza para ser, amar, soñar.
A los que llaman vagos, idiotas, locos, débiles.
No escuches la voz de los que viven sólo para afirmar, controlar,
o los que saben adónde van, dónde están, quiénes son,
los que llevan la frente alta y no les tiembla la voz.
A los que la ansiedad- la sociedad les hace fumar dos paquetes diarios,
a los que no son sociables, ni aptos, ni lúcidos,
ni extrovertidos, ni empáticos, ni asertivos, ni normales.
A los que nunca superarán un test psicológico.
A los que no soportaron el túnel y se fueron para siempre,
a los que atravesamos cada día el túnel agarrados a las paredes negras,
A todos los que saben o quieren escucharnos,
y no se fían sólo de los manuales, libros, test, estudios y estadísticas.
A los que roban dolor y devuelven sonrisas,
Y sobre todo, a todas esas pupilas dilatadas de tanta química que miran
aturdidas; pero tienen luz más hermosas:
" Que no existe locura, sino gente que sueña despierta"
Princesa Inca "La mujer-precipicio" 2011
La Princesa Inca
Collage de María Burgaz
Para los que cuando se enamoran lo hacen todo bien.
ResponderEliminarAlejandro Benedito Pons.
Te entiendo..